Ayer regresaba a casa tras pasar la mañana con mi abuela en el hospital (donde se me acumulan ejemplos de incomunicación que seguro dan para otra entrada del blog). Al pasar por el intercambiador de Moncloa (uno de los que menos frecuento) me animé a retirar un libro del servicio de Bibliometro, que hacía tiempo no utilizaba. Me llamó la atención que tuviesen uno de los volúmenes de Mujeres alteradas de Maitena. Mi ánimo no podía estar más necesitado de algo así, de manera que fue ese el que solicité al chico de la ventanilla.
_ Pero esto es un cómic _. Me dijo, como advertencia.
_Ya, ya.
_ ¿Lo quieres?
_Sí, claro que lo quiero.
Me fui de allí con mi ejemplar en la mano, tan feliz, y a lo largo del camino en el vagón tuve que hacer varias veces esfuerzo por no reírme a carcajadas delante de mis compañeros de viaje (no sé cómo se interpreta que una se ría sola, y en estos contextos de anonimato siempre me entra un inexplicable pudor).
El caso es que lo pasé en grande leyendo y nada más llegar a casa hice prometer a mi chico que también lo leería: los tics que recoge, las situaciones cotidianas... Si es que me vi a mí misma, a mis amigas, a mis amigos... Todo lo que día a día nos supera, aquí parecen sencillamente lo que son, momentos muy humanos que nos vulgarizan, nos obligan a no tomarnos en serio y ver el paisaje con cierta perspectiva.
Por cierto que entré en la página web de la autora para ver cuáles son sus nuevos proyectos y no encontré mucha información, aunque sí me tropecé con una noticia en VERTELE en la que afirman que La Sexta prepara una serie de televisión (del estilo de "Cámera café") basada en las viñetas de la argentina.
A ver cómo resulta el experimento....
viernes, 29 de agosto de 2008
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1 comentarios:
Es cierto, Maitena sabe reflejar como ninguna lo que nos pasa en el día a día a las mujeres contemporáneas.
Saludos y que se mejore tu abuela.
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