lunes, 29 de octubre de 2007

Usabilidad: simplifica y vencerás


Jakob Nielsen (1957, Copenhague, Dinamarca) es uno de los expertos internacionales sobre la usabilidad de los espacios web.Entre sus teorías destaca la afirmación de que los usuarios no leen con detalle las páginas que visitan, sino que la tendencia habitual del visitante web es la de “ojear” la página. Por lo tanto, como ingeniero de interfaces para el usuario, Nielsen ha desarrollado una serie de recomendaciones para preparar los textos de manera que pueda garantizarse y optimizarse su lectura: ¡Sea breve! (escribir para la web) y Cómo leen los usuarios en la web.

La recomendación principal de Nielsen en estos textos es la simplicidad: textos cortos; párrafos breves y estilo muy directo.

Su propia página web es un vivo ejemplo de las recomendaciones que formula. Sorprende ver que huye de imágenes y elementos gráficos accesorios y que reproduce el texto con caracteres simples y con jerarquía de tamaños que resultan chocantes ante lo elaborado de la mayoría de las páginas.

El País ha publicado hoy una entrevista con él, en la que advierte contra los 3 errores que debería evitar todo sitio web:

1.- Navegación difícil y una organización de la información confusa que se estructure de acuerdo con los criterios de la compañía en vez de pensar en el usuario.

2.- Un contenido escrito en lenguaje publicitario, ensalzando al máximo las bondades de los productos, pero pobre en información específica que los clientes quieren.

3.- Transacciones complicadas que exigen al usuario seguir muchos pasos para conseguir sus objetivos.

Como ejemplos de páginas web a imitar, señala: Google, Yahoo, eBay...

En cuanto a las tendencias del futuro, cree que el usuario móvil será importante. Para ello, la gran asignatura pendiente, advierte, es la falta de buenos servicios que hayan sido diseñados específicamente para los usuarios móviles.

Mi opinión sobre estas ideas es la siguiente:

1.- Totalmente de acuerdo con respecto a la necesidad de simplificar el contenido para lograr una asimilación mayor. Eso sí, no necesariamente “simplificar” es “reducir” o “limitar”. Creo que para que esta afirmación fuese más exacta habría que señalar que el contexo marca mucho: no es lo mismo un sitio web destinado a ofrecer un servicio, una herramienta, una información o un entretenimiento. De ahí por tanto que entendamos bien que se habla de “usabilidad”, es decir, un sitio práctico y útil, no necesariamente hablamos de un sitio agradable, creativo, inspirador o que persiga otros fines menos pragmáticos.

Fundamental, para mí, la idea de estructura. Creo que se publica tanta información y se dan tantos datos, que la adquisición de los mismos es una cuestión de discriminación, ¿con qué nos quedamos? El orden es primordial.

2.- Las tres características que da como falta de usabilidad son esenciales. Cualquiera que haya navegado le dará la razón. Es importante señalar que se trata de ideas en las que impera el sentido común y no son grandes hallazgos. Quizás los gestores de los websites (muchos de ellos contratan los servicios de profesionales de la comunicación para que los actualicemos y dotemos de contenido) deberían no esperar grandes ideas de importantes auditorías como claves para optimizar su eficacia y centrarse en pequeños conceptos muy concretos y asequibles.

3.- Efectivamente, no hay nada que hacer con el acceso a Internet desde el móvil si tenemos que seguir navegando por páginas web diseñadas para visualizarlas en un monitor. La navegación en estas versiones no adaptadas se realiza mayoritariamente en sentido vertical, no es nada operativa para determinadas aplicaciones y se encuentra desfasada con respecto al desarrollo tecnológico potencial que presentan estos aparatos.

lunes, 22 de octubre de 2007

Se agradece


El País lo había anunciado con su buenhacer publicitario y su "don de medios". Y los que vemos la corrida desde la barrera, amparados en nuestro teclado inofensivo y nuestro ojo criticón nos estábamos deleitando con la perspectiva de opinar sobre el supuesto cambio. Hoy, sin embargo, me he levantantado escéptica con todo, incluso con mi actitud aburrida de criticar sin más, así que no haré lo obvio (observar que no veo un gran cambio entre las páginas del nuevo diario "global") sino que reflexionaré sobre lo difícil que debe ser mudar de manto sin perder al cliente fidelizado. También reflexionaré sobre la incoherencia de quienes solemos criticar que no se profundiza suficiente en los temas porque no hay tiempo y todo abruma, pero nos permitimos analizar y juzgar un periódico por el cambio de color de sus páginas.


¿Tal vez el cambio de El País es tan profundo que se irá desgranando día a día en cada entrega dosificada de su innovación? Eso estaría bien y sería un puntazo por parte de una empresa como PRISA, que sabe tanto tanto de productos mediáticos.


Yo no sé mucho y por eso mis comentarios más inteligentes los he intercambiado con mi compañero de trabajo, cuando me ha conseguido el suplemento del domingo que en la oficina misteriosamente no estaba. Había volado.


_Es que el periódico ha cambiado y quiero echarle un vistazo.


_Ah. ¿Que ha cambiado? Bueno, no lo sabía.


_Sí. Contrataron a un tipo de Edimburgo, creo. Para hacerles un cambio radical.


_Ah. Ya lo veo. Está aquí.


_¿El qué? ¿El cambio?


_Sí, fíjate, ahora tiene una rayita azul encima.


_Yo lo que veo es que viene mucho más gordo. El suplemento, digo. Pero la portada es horrorosa.


_Yo la veo como siempre.


_No, qué va. Fíjate. Ahora todo es imagen. Parece un catálogo.


_Yo lo veo igual. Pero fíjate en la rayita...



Es verdad. Ahora sí que la veo.


Por dentro, el contenido no me parece muy distinto. Muy reforzado, eso sí, que es una palabra que se usa mucho ahora en la empresa. Está "reforzado" el interior porque ahora hay muchos más artículos que antes. Pero la temática no ha sufrido una gran revolución. Claro que tal vez no era el objetivo, porque el periódico dice que es el "periódico global" y a mí sí que me suena coherente esta intención de ser algo así, redondo, colectivo, muy "para todos" y muy acorde con lo que se lleva y está dominando.

Yo antes creía, eso sí, que el término "global" era malo. Pensaba que los medios progresistas tendían más a lo minoritario (aunque ya fuese tendencia). Pero nunca pensé que ser "global" fuese algo que festejar.

Por eso tal vez el periódico ha hecho un giro a la coherencia, y ahí es más valiente.
El tema de la ecología lo trata como siempre, de forma global, y nos da cincuenta ideas sencillas para salvar el mundo. Es muy global, claro. Y muy entretenido, que es algo importante ahora para todo producto. Hay que entretener, porque necesitamos muchos estímulos y con mucha frecuencia.

Otros conceptos muy familiares, que el periódico no ha querido dejar atrás en la mudanza son temas como: "bazar" "guía práctica" "pistas para ser felices" o "la mirada de". Ahí nos encontramos con su familiar estilo de revista de modas, que nos ha gustado tanto todo este tiempo.

Los rostros de modelos consolidadas; cineastas afamados; músicos consagrados y las plumas bien sólidas de siempre nos ayudan para que convertirnos en algo global no sea muy traumático.
En definitiva, yo no he notado un gran cambio, pero la intención de renovarse se agradece. Tal vez los que tengamos que renovarnos somos nosotros y El País sólo nos está ayudando a darnos cuenta. Él pone la rayita. Y nosotros tenemos que poner el resto. No vayamos a exigir a la prensa que refleje algo que no es real. Los reales y los globales, me temo, que somos los del otro lado. A ver cómo nos las apañamos.

lunes, 15 de octubre de 2007

Sociedad de la información Vs. sociedad del entretenimiento


Llevo todo el fin de semana observando la información que nos transmiten los informativos de las principales cadenas nacionales de televisión. Está claro que la principal subjetividad en la tarea informativa está en la selección de las noticias, es ahí donde el medio ejerce su mayor poder. Analizar, por lo tanto, el menú informativo que nos brindan los medios es fundamental para poder entender qué línea ideológica o qué interés subyace tras los mismos. En esta ocasión, sin embargo, no tengo que llegar tan lejos: las noticias escogidas no parecen responder siquiera a una intención política o moral, me encuentro más bien con un ejemplo de cómo la información va reduciéndose en favor de un género híbrido entre la noticia y el reportaje de un programa de entretenimiento (formato magacín).


De la selección de temas noticiosos que escogió el informativo de Telecinco del domingo a mediodía, diez minutos fueron ocupados por los temas siguientes:


- Muerte súbita de una niña aquejada de una simple gastronteritis.

- Reportaje sobre cómo se seleccionan los perros de rescate para equipos de salvamento.

- Modo de gestión de los viñedos según los cambios que se van produciendo en el clima.

- Congreso de videntes en una estación: amplio relato de las diversas artes adivinatorias.


El contenido de estos espacios también presentaba numerosos defectos según cualquier código de ética o deontología periodística:


En la información sobre la muerte de la menor, el relato de los hechos venía apoyado por las declaraciones de una compañera de campamento. Una menor respondía a la demanda informativa del periodista para relatar cómo era la niña fallecida (apelando a los recuerdos de la pequeña, que había visto morir a su amiga en la cama de al lado), en una descripción que en boca de una persona de tan corta edad, posiblemente superada por las circunstancias e incapaz de valorar la repercusión de sus palabras, resultaba incluso absurda ("era agradable", decía). La amiga también era invitada a narrar cómo la compañera se había ido encontrando cada vez peor, qué decía en su postración y cómo recordaba ella estos últimos momentos.


Dudo sobre la aplicación de cualquier medida de protección a la infancia en una información en la que se escoge como fuente el testimonio subjetivo de un testigo sin la suficiente responsabilidad como para poder medir el alcance de sus palabras, así como sobre la falta de escrúpulos que supone someter a una persona indefensa por su edad (así se considera a la infancia) frente a unas actuaciones que es incapaz de valorar (la dimensión de su testimonio público, etc).


En el informativo de esta misma cadena del día siguiente, las informaciones se repiten. Seguimos teniendo como actualidad de primera página el relato del cambio en los usos y costumbres de los vendimiadores, con un amplio despliegue sobre su tendencia, avalada por el testimonio de un dueño de viñedo del que se hace abundante mención y sin añadir ni un ápice más de información de la ofrecida en las 17 horas anteriores.


En esta misma entrega de noticias, vuelve a surgir el testimonio de la menor que actúa de portavoz de la muerte de su amiga, sin ningún nuevo matiz en la repetición de sus declaraciones, cuya reiteración elevan la irresponsabilidad del informante.


El resto del informativo matinal se muestra igual de inconsistente: en la selección de temas, mezcla de sucesos y anécdotas, y en el estilo informativo y rigor de documentación o fuentes.


Mi impresión ante este breve e insuficiente análisis de las informaciones es la que llevo tiempo gestando y confirmando gracias a estos contrastes prácticos: la información que se está ofreciendo, en general, desde los medios de mayor alcance (televisión, fundamentalmente) está tendiendo cada vez más al estilo y contenido de entretenimiento. Los datos y rigor aburren, y profundizar en un tema es irrelevante y cansa. La televisión tiene la premura del tiempo y la capacidad de atención de los públicos es limitada. Surge, entonces, la necesidad de aportar criterios de selección informativa que se asemejan más al criterio de selección de un espectáculo: impactos elevados, protagonistas humanos, identificación clara del perfil de víctima, escaso análisis, testimonios en primera persona para dotar de mayor credibilidad a la noticia, temas anecdóticos y próximos, búsqueda de la empatía con el público, contenidos variados, presencia de temas sociales, informaciones sobre tendencias, usos y hábitos del público...


No entraré en juicios de valor sobre esta corriente de informar-entretener que está generalizándose en la mayoría de los medios. Es una simple toma de conciencia de que esto es lo que se está produciendo en los productos informativos que consumimos. El usuario de los medios es cada vez más esto mismo: un consumidor, y la oferta que se le hace está dirigida a su capacidad para asumir y recibir determinado material. La selección del mismo, por tanto, incrementa su matiz de arbitrariedad y la responsabilidad ante tal tarea ya no podrá estar únicamente en base a la intención informadora, sino que ahora habrá que poner en la misma balanza los criterios comerciales y de diversión que empiezan a compartir protagonismo.


No soy ingenua y no creo que esta tendencia usurpe la primacía a un periodismo pronfundo de información densa y exposición impecable que no ha sido tendencia nunca en la televisión, pero sí me gustaría introducir la reflexión sobre la relación que existe entre la mayor preparación de la sociedad, su mayor nivel educativo y cultural, su mayor capacidad para realizar determinados esfuerzos intelectuales, frente a su incapacidad para asimilar el volumen inmenso de datos, el síndrome "multitarea" que va calando en la capacidad de atención del usuario multimedia, la imperiosa necesidad de discriminar entre los contenidos recibidos, la falta de tiempo para los análisis profundos y la frivolidad que impera sin discriminación en los más diversos órdenes de la vida cotidiana. Una contradicción de contexto y alcance que me parece fascinante y que creo que debería seguir observando, como así haré, con la ayuda de otras observaciones complementarias que pueda ir recibiendo y encontrando.


martes, 9 de octubre de 2007

El País anuncia una renovación

Su tarjeta de presentación va a incluir el adjetivo "global" como lema, y en la definición de los rasgos que configuran su nueva forma y fondo recibo un mensaje que, como casi todo lo que me provoca El País desde hace unos años, me suena a "ya vivido".

Veamos cómo nos anuncia el medio su nueva etapa e intenciones:


- Texto completo de la noticia (EL PAÍS, 9/10/07)



No me cabe duda. Esta sensación de estar leyendo algo ya contado es lo que prima tras el repaso a esta novedad de la cabecera. Sin embargo reinventarse y redefinirse parece ser un concepto necesario y muy conveniente en la sociedad actual, y está bien que un diario que quiere perpetuarse busque el modo de ir hacia adelante renovando sus propuestas.

La pega que yo le pongo siempre a El País, y que no encuentro modo de obviar, es que todo lo que toca huele a "tendencia". Su suplemento hace tiempo que dejó de ser un producto de lectura dominical de cierta audacia para convertirse en una guía de compras, usos y costumbres avalados por esa "modernidad" a la que aluden, en un término tan gastado que debería entrar en el lote del plan "renove" al que han sometido al resto del diario.

El País hace tiempo que no tiene que convencer, y se nos ha aburguesado. De esta idea ya me he hecho eco en anteriores ocasiones y no sé si este lavado de cara del periódico conseguirá hacerme cambiar de idea. De momento, el listado de rasgos mutables me parece también la enumeración de un catálogo ya visto: mayor protagonismo de la imagen, esfuerzos por optimizar la infografía, contar las noticias de manera diferente, público heterogéneo...

Lo curioso es que este diario quiere hacer un cóctel complicado y no se atreve a confesar que no tiene la receta: para recordarnos que es una publicación con solera y para refrescarnos la memoria sobre el papel que desempeñó en sus comienzos, hace referencia a cómo "revolucionó la prensa española". Sin embargo, no nos explica qué tiene que ver el espíritu rebelde y "revolucionador" con ese "periódico global" que aspira a ser.

Habla del "mayor grupo de educación, información y entretenimiento" y lo intercala con sus evocaciones de ruptura, espíritu crítico y actitud contestataria que le llevó a la gloria. En un esfuerzo por llegar a ser casi tan inteligentes como la élite que está detrás de eta megaindustria del ocio y la información (unir estos conceptos es otra de las maniobras de prestidigitación que tan sin despeinarse suele ejecutar el habilidoso medio), no nos queda otra que interpretar que la sociedad ha dado un giro radical y ahora la mayoría es la que tiene razón y que el triunfo de la minoría y la crítica nos ha llevado a una etapa en la que la minoría se multiplicó y todo lo que viene avalado por esa "globalidad" y universalidad de criterio es lo aceptable.

Sin embargo, mi humilde opinión me hace repetir que la naturaleza humana no se renueva con tanta agilidad (probablemente porque no puede contratar los servicios de un completo equipo de diseñadores y sabios de Edimburgo), así que no me cabe en los esquemas este gazpacho dulce que la criatura de Prisa nos va a vender mañana.

Le daremos, por supuesto, el beneficio de la duda y nos enfrentaremos a este nuevo estilismo con la frescura con la que nos enfrentamos a todo lo estéticamente adaptable, que tan bien nos sienta y que tan bien encaja con la costumbre de "estímulo contante" que es una etiqueta muy propia del consumo intelectual y sensorial del momento. Sólo por el esfuerzo de marchar a tierras escocesas para encontrar a los sabios que abanderan el proyecto, la cosa pinta, como dicen ellos, "moderna". Porque así es como nos vamos a sentir cuando abramos las páginas del nuevo periódico: completamente modernos, todos juntos, en esta esfera global heterogénea, que espera, ansiosa, que le cuenten las noticias "de otro modo".

¿Me lo explican?

martes, 2 de octubre de 2007

Una compañía lanza un programa informático que detecta términos sexistas


Fuente: Europapress


The Reuse Company ha lanzado al mercado una herramienta informática que, por un coste de 9.000 euros, detectará cualquier término utilizado con carácter "sexista" que aparezca en un documento, en una página web o en todo un 'site' de Internet y sugerirá al usuario que lo reemplace por otro "más adecuado".

Con sólo instalarla en el ordenador, la llamada 'herramienta Themis', cuyo funcionamiento es muy similar al de un corrector ortográfico, "rastreará documentación y sitios web" y alertará al usuario de giros "sexistas" como la frase "se precisan ingenieros informáticos" en lugar de "se precisan ingenieros e ingenieras informáticos", explica la compañía en su dossier informativo.

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Los dominios .es admitirán la letra "ñ"



A partir del martes 2 de octubre a las 6.00 horas los caracteres propios del castellano, catalán, euskera y gallego podrán incluirse en el registro de dominios “.es”. De este modo se cumplirá el compromiso adquirido por el Gobierno en la Ley de Medidas de Impulso de la Sociedad de la Información que se tramita actualmente en el Congreso de los Diputados.

(Fuente: Ministerio de Industria, Turismo y Comercio)

Red.es, entidad del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio que tiene asignada en España la autoridad de registro de dominios, ha informado a los Agentes Registradores Acreditados que los caracteres que podrán incorporarse a los dominios “.es” son los siguientes:

á, à
é, è
í, ï
ó, ò
ú, ü
ñ
ç
l•l (l geminada del catalán)


El registro de dominios “.es” con los mencionados caracteres se pondrá en funcionamiento de forma escalonada. En una primera fase, que comenzará el 2 de octubre de 2007 a las 6:00 horas y finalizará a las 18:00 horas del 30 de octubre de 2007, sólo los titulares de nombres de dominio registrados antes del 1 de junio de 2007 podrán solicitar la/s versión/es multilingüe/s de dichos dominios, de acuerdo con las reglas de asignación establecidas en la última instrucción y basadas en los principios de derivación y prioridad.


Posteriormente, con un aviso que se publicará con 15 días de antelación, se iniciará una nueva fase que permitirá la solicitud de nombres de dominios “.es” multilingües a todos los usuarios que así lo soliciten.


Fases de Implantación IDN (Dominios multilingües):

1. Fase de Preferencia: Para actuales titulares preferentes (del 2 al 30 de octubre)
2. Fase de Asignación: Red.es decide según las normas de asignación, las solicitudes IDN a aprobar (a partir del 30 de octubre)
3. Fase Abierta: Una vez que ha pasado el plazo de solicitud de los titulares con preferencia, se abre el registro IDN. Por orden de llegada, se asignan los dominios solicitados y que estén libres (Red.es publicará con 15 días de antelación su inicio)


El registro de Dominios de Red.es dispone de una página en Internet con la información disponible en http://www.dominios.es/ y un teléfono de información 902 010 755.

lunes, 1 de octubre de 2007

Más de lo mismo

Abrir El País y encontrarme una entrevista realizada por uno de los "grandes de la casa" a otro de los bien cuidados de la misma (Juan Cruz entrevista a Arturo Pérez Reverte) me causa un extraño "dejá vu" o alteración de mi temporalidad, pues es una imagen harto frecuente y tan predecible que me lleva a confundirla con algo cotidiano.

Todos sabemos que nuestro diario progre sabe muy bien hacer su trabajo, al estilo Corte Inglés: una ya no acierta a saber qué productos culturales consume auspiciados por la gran P de Prisa. Y, del mismo modo que los tentáculos de nuestro ubicuo centro comercial, la empresa cultural por excelencia nos orienta, nos conduce, y nos celebra las obras que mejor cuida. Es razonable, faltaría más. Pero también es cansino.

El País hace tiempo que arriesga poco, y se nos va volviendo burguesote, en la medida en que quiere conservar su nivel de buena vida y buena mesa. Pero a veces este gesto de autocomplacencia coincide con un rasgo de escasa originalidad, y el coctail se atraganta porque se hace espeso.